¿Cómo decir que no al cigarro?

Al desarrollar la actividad "Juego de Roles" los alumnos actuaron con bastante responsabilidad formando los grupo y eligiendo las situaciones para ser presentadas ante sus compañeros. Ellos dispusieron de un tiempo para organización y ensayo.

En las escenas mostradas se produjeron algunos momentos difíciles donde el nerviosismo les impidió recordar todo lo planificado. En otros momentos las risas no permitieron que las palabras fluyeran.

Al finalizar la actividad los alumnos ejemplificaron variadas formas de negarse al consumo del tabaco y se comprometieron a preparar exposiciones orales y visuales para sus compañeros de otros cursos. A la vez, esto les incentivó a crear un Diario Mural exclusivamente dedicado al concurso, lo que ha despertado el interés de alumnos de otros cursos, quienes solicitan permiso para ir a mirar y leer las publicaciones realizadas.

Todo bien, comic en grupo

Con la lectura del cómic Una manera de empezar€, los alumnos tuvieron la oportunidad de explayarse, compartir algunas historias de personas fumadoras y expresar sus ideas acerca de la situación que se muestra en la historieta, exponiendo las conclusiones oralmente y en afiches o textos colocados en el diario mural. A través del texto, los alumnos reconocieron las etapas que van surgiendo, que llevan a los jóvenes a aceptar un cigarrillo y que son previas a la adicción.

Ellos se refirieron a la presión que un amigo o un grupo puede ejercer para inducir a otro al consumo de tabaco. Para ellos la falta de seguridad, el deseo de ser aceptado por un grupo, la idea de demostrar madurez, la depresión, los problemas, el aburrimiento y la curiosidad son algunas causas que los jóvenes identifican como incitadoras al consumo.

El compromiso de evitar los riesgos de consumo y de daño a su cuerpo sigue intacto, con mayor interés de aprender y compartir estas instancias

Pulmones de Plástico

Hola, en esta primera publicación les vamos a contar sobre la actividad que hicimos con el profesor de Ciencias Naturales, Rolando Mardones.

El profesor Mardones nos pidió a todos que lleváramos a la clase una botella de plástico y algodón, ya que con eso haríamos unos pulmones.

Primero llenamos las botellas con algodón y le hicimos un agujero a la tapa de la botella, allí colocamos el cigarro, con la ayuda de un mechero encendimos los cigarros que el profesor trajo para el experimento.

Luego empezamos a apretar y soltar las botellas y el humo comenzó a entrar en los pulmones de plástico pasando a través de los algodones, los que de a poco se fueron tiñendo de amarillo.

Con este entretenido experimento en el que nos ayudó el profesor de Ciencias Naturales pudimos ver como se van ensuciando los pulmones de las personas que fuman y lo mal que le hace a nuestro organismo el cigarrillo.